A partir del próximo martes 1 de noviembre, a las 21:00h, Canal HISTORIA, producido por AMC Networks International Southern Europe, presenta en exclusiva una programación especial sobre Egipto con motivo del 100º aniversario del descubrimiento de la tumba de Tutankamón. El canal profundiza en una de las civilizaciones más importantes de la humanidad gracias a producciones como ‘Antiguo Egipto: Crónicas de un Imperio’, ‘La gema perdida de Tutankamón’, ‘El reino perdido de los Faraones negros’ y ‘Los últimos secretos de los jeroglíficos’.
La serie ‘Antiguo Egipto: Crónicas de un Imperio’ cuenta con elaboradas animaciones 3D, que garantizan una experiencia inmersiva y apasionante en uno de los imperios más poderosos de todos los tiempos. Por otro lado, en una zona remota del desierto del Sáhara, hay trozos de cristal que son incluso anteriores a los antiguos egipcios, pero el origen de este material es un enigma que los expertos se proponen resolver en ‘La gema perdida de Tutankamón’. Asimismo, en ‘El reino perdido de los Faraones negros’ se cuestiona la teoría de que Egipto fue la única gran civilización de África, y con ‘Los últimos secretos de los jeroglíficos’ el canal se sumerge en las profundidades del palacio de los jeroglíficos para descubrir los misterios de los sacerdotes, escribas, pintores, grabadores y constructores que crearon este monumento.
Hace unos 5.000 años, surgió en el Nilo uno de los imperios más grandes y poderosos de todos los tiempos: el antiguo Egipto. Esta serie de ocho episodios descubrirá las historias de pirámides, faraones y sacerdotes, así como las de batallas decisivas. Pero esta producción tratará de ir más allá de lo conocido para explorar la vida y los pensamientos de la gente corriente: el funcionario, el médico o el agricultor. ¿Cómo construían sus casas? ¿Cómo se ganaban la vida? ¿En qué creían?
Cada episodio destaca un aspecto de esta fascinante cultura antes de su desaparición. Para ello combina la participación de expertos internacionales en arqueología, egiptología y ciencias forenses con imágenes espectaculares rodadas en templos, pirámides y excavaciones arqueológicas, en el río Nilo y en el Gran Museo de Egipto, en Giza. La serie cuenta además con elaboradas recreaciones, infografías, fragmentos de novelas gráficas y animaciones 3D, que garantizarán una experiencia inmersiva.
El Nilo es el sustento de Egipto. Su agua transforma los suelos resecos en productivas tierras de cultivo, y de su barro nacen las primeras casas y asentamientos. A partir del año 5000 a. C., los nómadas del desierto comienzan a instalarse en el valle del Nilo: dejan de ser cazadores-recolectores para dedicarse a la agricultura y la ganadería. Son el germen de la civilización egipcia.
Los dioses y los reyes gobiernan el antiguo Egipto. Son omnipresentes, y conducen al país a profundas crisis y a una grandeza inimaginable. Esta civilización dejó tras de sí mucho más que templos magníficos y pirámides impresionantes: algunas de sus invenciones constituyen piedras angulares del Estado y la sociedad incluso en la actualidad.
En el reino de los faraones surgen ciudades que se convertirán en las más antiguas y grandes de la humanidad. Esta revolución urbana se ha pasado por alto durante mucho tiempo, porque, a diferencia de los impresionantes templos de piedra, la mayoría de los asentamientos han desaparecido por completo en la actualidad. Sin embargo, cada vez se está investigando más la vida urbana y la cultura residencial de los antiguos egipcios.
El antiguo Egipto es famoso por el culto a los muertos. Sus complejos funerarios, momias y fabulosos tesoros siguen atrapando la imaginación de la gente. En aquella época, estos ritos y ceremonias tenían una enorme importancia para los egipcios. A partir de los muertos, los científicos tratarán de averiguar todo lo posible sobre la vida en la tierra de los faraones.
Nada representa más a la civilización del antiguo Egipto que las pirámides, pero aún siguen siendo un gran misterio para los investigadores. Este episodio recorre la historia de la construcción de tumbas en la tierra de los faraones.
Las mujeres del antiguo Egipto ejercían una fascinación especial, incluso entre sus contemporáneos. Hubo madres que asumieron la regencia de sus hijos, o reinas como Cleopatra, que gobernó en solitario el Imperio del Nilo. Que el antiguo Egipto nos siga cautivando hoy no solo se debe a sus grandes hombres, sino también a un elenco de mujeres extraordinarias.
En el antiguo Egipto, las guerras se consideraban una forma legítima de preservar el orden divino si el propósito era proteger las fronteras del imperio o incluso expandirlas. Este episodio muestra cómo, en tiempos de debilidad militar, Egipto se convirtió en objetivo de invasores extranjeros; en épocas de paz, sin embargo, los faraones se apoyaron en la diplomacia. La guerra y la paz se equilibraban mutuamente.
¿Cómo llegó Egipto a un periodo final de esplendor con la dinastía ptolemaica? ¿Y por qué cayó el imperio bajo su dominio? Este episodio cuenta la historia de cómo el general Ptolomeo, del Ejército de Alejandro Magno, fundó una nueva dinastía greco-egipcia. Sin embargo, en la segunda mitad de esta, surgió una crisis que ni siquiera Cleopatra pudo vencer.
En una zona remota del desierto del Sáhara, dispersos por la arena, hay trozos de cristal que son incluso anteriores a los antiguos egipcios, pero el origen de este material es un enigma. Ahora, un equipo de expertos se propone resolver por fin el misterio. La búsqueda de respuestas los ha llevado de Egipto a Italia, de Siberia a Alemania, y finalmente a EE UU. El científico norteamericano Mark Boslough decidió recorrer las dunas para ver el cristal por sí mismo. De vuelta a su laboratorio, cargó todos los datos recopilados en el ordenador más potente del mundo para conocer la verdad. Descubrió que los pequeños asteroides, cuyo tamaño impide que sean detectados, tienen un peligro potencial muy grande, y que el cristal del desierto es una prueba de su poder.
Durante casi cien años, el antiguo Egipto estuvo gobernado por la conocida como ‘Dinastía de los faraones negros’. Procedían del reino de Kush, al sur de Egipto, en lo que hoy es Sudán. Ahora, más de 30 equipos internacionales de arqueólogos están trabajando con el Departamento de Antigüedades de Sudán para excavar magníficos yacimientos, desde pirámides hasta templos, a lo largo del valle del Nilo. Los expertos que aparecen en estos especiales cuestionan la teoría de que Egipto es la única gran civilización de África, y aportan pruebas de que el reino de Kush de los faraones negros fue una destacada superpotencia en el continente que la Historia ha ignorado hasta ahora.
Este episodio muestra la primera investigación mundial de las cámaras funerarias sumergidas de una pirámide, y revela además cómo una nueva exploración de la antigua ciudad de Kerma ha dado pistas de que el reino de Kush fue en realidad una gran potencia. Además, los drones permitirán mostrar por primera vez toda la extensión del territorio de los faraones negros.
En el segundo episodio, seremos testigos del descubrimiento de la desaparecida ciudad de Napata, un importante centro de poder de los faraones negros que nos dará pistas cruciales sobre cómo gobernaban su reino. Además, conoceremos un proyecto científico de vanguardia cuyo obetivo es extraer ADN de los restos momificados de súbditos de los faraones negros.
Hace 200 años, un joven historiador francés, Jean-François Champollion, logró lo imposible: descifrar la escritura jeroglífica después de un milenio. Gracias a él, toda una civilización enterrada bajo las arenas de Egipto pudo revivir. En el sur del país, cerca de Luxor, los expertos están intrigados con la tumba de un sacerdote llamado Padiamenope, la más monumental de Egipto, profusamente adornada y más grande que las de los faraones. La misión arqueológica dirigida por el Instituto Francés de Arqueología Oriental de El Cairo permite conocer sus últimos hallazgos. Gracias a las excepcionales visitas virtuales en 3D que se sumergen en las oscuras y sofocantes profundidades de este palacio de los jeroglíficos, el espectador descubre los secretos de los sacerdotes, escribas, pintores, grabadores y constructores que crearon el monumento.