Feliciano López sabe exactamente cuando tocó por primera vez una raqueta de tenis. Fue un día de Reyes hace 25 años. Él tenía entonces 4, la raqueta era de madera y desde ese momento no se separó de ella. Hasta el punto de que su padre, aficionado a ese deporte, decidió volcarse con la nueva afición de su hijo y se sacó el título de Monitor. Fue él quien, a partir de entonces, enseñó y entrenó a sus dos hijos, Feli y Víctor.
Hoy, Feliciano López es uno de los mejores tenistas del circuito internacional. Pero no sólo es un campeón en la cancha. Quienes le conocen bien, opinan que es mejor persona que tenista.
Son razones suficientes para que el canal de televisión BIO le haya considerado un personaje de indudable interés para el público. Por ese motivo, y en coproducción con Phileas Productions, ha realizado el documental Feliciano López, dirigido por Eva Armenteros, que se estrenará en exclusiva el próximo 8 de enero a las 23.00 horas. Será una oportunidad excelente de conocer el trabajo y el esfuerzo que han llevado a Feliciano a ser uno de los referentes más firmes del tenis español.
Por primera vez, las cámaras de una televisión han traspasado las puertas de su hogar familiar en Madrid y en Toledo, y han entrevistado a sus padres, a sus abuelos, y a su hermano Víctor, tenista profesional, como él. BIO se ha “colado” también en su fiesta sorpresa de cumpleaños, en su gimnasio, e incluso le ha acompañado a su pueblo, donde Feliciano ha ejercido recientemente de pregonero.
Primeros raquetazos
Aunque nació en el pueblo toledano de Portillo, los primeros años de la vida de Feliciano transcurrieron en Melilla. Aquí, entre los 5 y los 8 años, compatibilizó la práctica del tenis con la del fútbol y la natación, en la que también destacaba. “Cuando empezó a verme jugar, mi padre se apasionó y se sacó el título de Monitor”, cuenta Feliciano. A partir de esa edad, sin embargo, tuvo que elegir y se decidió por el tenis. A los 12 años, ya en Madrid, comenzó a entrenar en la Federación de Tenis de Madrid, junto a su hermano Víctor. Obtuvo resultados muy buenos ganando 3 torneos internacionales en la categoría alevín y proclamándose finalista del Campeonato de España de la categoría. En los siguientes años sigue una progresión muy buena que le lleva a ganar el Campeonato de España infantil de 14 años y a formar parte del equipo nacional infantil. Me di cuenta – señala – de que destacaba en las competiciones internacionales, y a los 13 o 14 años me decidí.
Amigo de sus amigos
La amistad es básica en la vida de Feliciano. El documental comienza precisamente con una fiesta de cumpleaños sorpresa que le preparan sus amigos. “Para mí los amigos son muy importantes. En los mejores momentos de mi vida he estado acompañado de amigos. Quieren lo mejor para mí y llegan a viajar a mis torneos para acompañarme. En los malos momentos, siempre han estado ahí, y eso es lo que yo valoro”.
“Ellos también le valoran a él”, explica su hermano Víctor. Su amigo y compañero Fernando Verdasco comenta: “es la persona más generosa que conozco. Cuando va a cenar con amigos, siempre se empeña en invitar él a todo el mundo, como si fuera Rockefeller y le sobrara el dinero”. Sus amigos no son sólo chicos. De hecho, un grupo de amigas suyas ha creado la peña Lomazo’s Team – en honor al fantástico físico del tenista -, y viajan a todos los torneos en los que juega para animarle y acompañarle. “Adoramos a Feli, es de la familia, como un hermano”, afirman.
Trabajo duro
Ser un deportista de élite tiene sin embargo sus inconvenientes. El canal BIO acompaña al tenista a una de sus jornadas de dura preparación. En primer lugar, varias horas de entrenamiento en la pista con su preparador Francisco “Pato” Clavet, ex tenista profesional, que le ha ayudado a perfeccionar su técnica: “el saque, y especialmente, el segundo saque es lo mejor que tiene Feliciano. Lo hace con una velocidad increíble”. Un sobrecito de fruta liofilizada es todo el capricho que se pueden permitir. “Es nuestro pincho de tortilla”, bromea Clavet.
A continuación, un par de horas en el gimnasio del Centro de Alto Rendimiento Blume para fortalecer y equilibrar los músculos. El tenis es un deporte que se juega fundamentalmente con una parte del cuerpo, y es necesario desarrollar y poner en forma la otra.
Todo este esfuerzo ha tenido una compensación: el campeonato de la Copa Davis de 2008 y 2009, dos títulos de la ATP en individuales (Viena 2004 y Johannesburgo 2010), cuatro finales y un título de la ATP en dobles.
El orgullo de la “armada invencible”
Representar a España en el equipo nacional de tenis es muy importante para Feliciano. “Cuando represento a España es especial, la responsabilidad es mayor. En Argentina, en la Copa Davis, nadie creía que ganaríamos. Fue el momento más importante de mi vida” afirma.
A su juicio, en el fenómeno de la llamada armada invencible de nuestro tenis, “ayuda mucho que seamos jugadores de generaciones parecidas, quitando a Rafa, que es más joven”. Para el tenista, “Rafa Nadal es una persona especial que ha nacido para ser un fenómeno; tiene unas cualidades brutales. Hoy por hoy, creo que es el mejor deportista español de la historia. De él sólo puedo decir cosas buenas. Es un gran compañero y un gran amigo”.
La música, eterna compañía
BIO es testigo de la gran afición de Feliciano por la música. Aprovecha cualquier ocasión para escuchar a sus cantantes o sus temas favoritos. “Me hubiera gustado ser cantante y no tenista -confiesa mientras escucha en su coche a Alejandro Sanz-, ¡qué pena que tenga esta voz!”.
Esa voz, sin embargo, no impide que Feliciano acompañe las canciones a pleno pulmón, e incluso que tenga temas fetiche que repite una y otra vez. Uno de ellos es “Peter Pan”, de Dani Martín. Precisamente el cantante confiesa en el documental que se siente muy identificado con Feliciano “porque es un chaval de una familia de Toledo que, a partir de ahí, ha ido desarrollando su ilusión y ha llegado a donde está por poner su corazón. Cuando le oí decir que “Peter Pan” es una canción muy importante para él, que escucha antes de los partidos, me sentí muy orgulloso”.
El hombre de moda
Asistir a una sesión de fotos de moda con Feliciano no es apto para corazones sensibles. El espectacular físico del tenista, la belleza de sus rasgos, el impacto de su mirada azul, su increíble fotogenia son cada vez más reclamados en los medios de comunicación. Las cámaras del documental están presentes esta vez durante la realización de un reportaje fotográfico. Feliciano posa como un profesional, se cambia de ropa, muestra sus trabajados músculos y hace una demostración de soltura. La estilista responsable del trabajo no puede ocultar que disfruta: “Feliciano es una de las celebrities más accesibles, confía plenamente en ti, y te deja trabajar”
Fama y vida privada
A su pesar, Feliciano López ha sido últimamente protagonista de la llamada crónica rosa. “Es cierto que en los últimos años, por estar con una pareja que trabajaba en ese mundo, uno se ve más metido. Te acostumbras a que te sigan y a que te pregunten, pero en realidad me parece horroroso. Creo que en España se está llegando a un punto en el que todo vale. Cualquiera puede ir a un programa de televisión y decir cualquier barbaridad. Y cuanto más grande sea, más revuelo va a crear y más dinero va a cobrar. Yo estoy en contra de todo eso. Se está perdiendo el respeto a la gente y a la intimidad”, opina Feliciano. “No puedo entender que le importe a la gente algo que a mí me pase con mi pareja. Hay periodistas que te hacen primero una pregunta educada, y luego te sueltan la bomba, pero creo que todo pasará y volverá a la normalidad”.
Para su padre, lo peor es que “a veces, en ese mundo de la farándula, se te cuela gente que no es de la partida”.
Siempre, con la familia
Feliciano López tiene su propia residencia, pero su hogar sigue estando en la casa de sus padres, en Madrid. Su madre muestra a las cámaras de BIO la habitación del tenista, con todos sus trofeos y desvela pequeñas intimidades de Feli, como sus gustos gastronómicos. “Las croquetas de mi madre son únicas” confiesa sin empacho este deportista que ha sabido compatibilizar su vida profesional con unas magníficas relaciones familiares. Su hermano Víctor, también tenista, es su mejor amigo. “Ha sido estupendo que uno de nosotros haya llegado tan alto” –afirma sin asomo de envidia-, y mantiene una constante relación con sus abuelos, a quienes visita con frecuencia en el pueblo. Y es que, según confiesa su madre, “Feliciano es mejor persona que tenista”.